Un balance final del estado de la educación obligatoria
Con base en la información presentada en este documento y en otras fuentes de información, se enlistan a continuación los aspectos del SEN que el INEE considera que se deben de mejorar, y los que son dignos de reconocimiento:
Logros y mejoras
- La evaluación del SEN realizada por el INEE en su nueva etapa como organismo constitucional autónomo, ha traído como consecuencia un mayor conocimiento, actualizado y documentado, de las fortalezas y debilidades de la educación nacional, así como un mayor avance en la cultura de la transparencia y la rendición de cuentas. El sistema educativo es el sector social más evaluado en el país, lo que muestra el gran interés del Estado mexicano por mejorar la calidad de la educación que se ofrece en todo el territorio.
- Los avances más notables en el SEN tienen que ver con el acceso, la permanencia y la eficiencia terminal de los estudiantes en la educación obligatoria.
- En los últimos años, el gobierno federal ha impulsado una Reforma Educativa de gran calado que ha logrado, entre otras cosas, recuperar la rectoría del Estado en materia educativa; avanzar en la implantación del SPD al ordenar los procesos de ingreso, promoción, permanencia y reconocimiento de los docentes a través de reglas claras y centradas en su mérito; impulsar un nuevo Modelo Educativo, más inclusivo, que pone énfasis en el estudiante como eje central de toda la política y la actividad educativas, y en la escuela en tanto centro del quehacer educativo; renovar y articular planes y programas de estudio de la educación obligatoria, enfocados en los conocimientos y las habilidades clave, que incluyen las competencias socioemocionales de los estudiantes; mejorar la infraestructura de los centros escolares, y regular el ingreso y la promoción de los docentes que trabajan en las escuelas normales.
- El concurso ha sido la vía de ingreso y de promoción a cargos directivos de 187197 docentes. Asimismo, se ha evaluado el desempeño de cerca de 272426 profesores.
- El Sistema Nacional de Evaluación Educativa (SNEE) se encuentra en funcionamiento. En él intervienen las autoridades educativas de la federación y de las entidades federativas bajo la coordinación del INEE. En este marco se diseñó la Política Nacional de Evaluación Educativa (PNEE) y se encuentran en desarrollo programas y proyectos estatales e interestatales en todo el territorio nacional.
- El INEE ha impulsado cuatro bloques de directrices para la mejora educativa, aceptadas por las autoridades educativas y los organismos descentralizados; su implementación está en curso, en materia de formación inicial de docentes, atención a hijos de jornaleros migrantes, educación indígena y mejora de la permanencia escolar en educación media superior.
- Se ha avanzado en la cultura de la evaluación, entendida como la toma de decisiones basada en evidencias. Las evaluaciones realizadas en el marco del SNEE y por el propio INEE dan cuenta del vasto acervo informativo del que dispone la nación en materia educativa. Día con día se gana terreno en el uso de la información por parte de las autoridades educativas federales y locales como insumo para tomar decisiones de manera documentada.
- La sociedad civil está también más preparada y documentada para exigir a las autoridades de los distintos órdenes de gobierno el impulso de políticas y programas educativos que aseguren el derecho de todas las niñas, niños y jóvenes que se encuentren en el territorio nacional a recibir una educación de calidad con equidad, a fin de conseguir el máximo logro de aprendizajes.
Retos que aún se deben enfrentar
- México tiene problemas sociales que impactan el desarrollo del sistema educativo y de la educación: pobreza, inequidad y falta de inclusión son algunos de los más importantes.
- Las condiciones sociales y educativas del país se traducen en niveles insatisfactorios de aprendizaje y en una oferta escolar muy inequitativa, lo que impide romper el círculo de la pobreza de la población más desprotegida.
- Estas condiciones afectan también la cobertura de la demanda potencial, especialmente en los niveles de educación preescolar y de media superior, que en el mejor de los casos apenas se acerca a 80% del universo de niños y jóvenes por atender.
- Sigue habiendo opacidad en el manejo de los recursos educativos, especialmente en lo que respecta al gasto de las entidades federativas.
- Es necesario mejorar sustancialmente la distribución de los gastos federal y estatal, de manera que con acciones afirmativas de financiamiento se logre compensar a las escuelas que atienden a poblaciones vulnerables y que hoy operan en condiciones deplorables.
- Es preciso resolver los obstáculos que enfrenta la implantación del Servicio Profesional Docente. En algunos grupos magisteriales geográficamente localizados no ha permeado completamente la idea de ingresar al SPD y promoverse a puestos directivos y de asesoría técnica a través de concursos de oposición; sigue habiendo resistencias a la Evaluación del Desempeño; algunas secciones sindicales y autoridades en los estados continúan poniendo obstáculos a la entrega de plazas de acuerdo con las listas de prelación; en varias entidades no hay suficiente transparencia en la forma como se decide abrir a concurso las plazas vacantes; aún es necesario mejorar los instrumentos y procedimientos de la evaluación en el SPD.
- El mejoramiento de la formación inicial de los docentes, la formación continua de los profesores en servicio y la puesta en marcha del SATE son tres de las grandes tareas pendientes del SEN. Aunque en este sexenio se han hecho esfuerzos por avanzar en la materia, el camino por recorrer es todavía muy largo.
- La infraestructura, el equipamiento, el acceso a internet y los acervos bibliográficos de los centros escolares, especialmente los más alejados de las zonas urbanas, son tareas en las que hay mucho por hacer para lograr una base común y, con ello, brindarles a todos los estudiantes las condiciones necesarias para aprender.
- Un desafío más refiere a los servicios de educación especial. Ésta es una modalidad educativa que se encuentra desprotegida, con importantes carencias organizativas, operativas y de personal especializado.
- Quedan aún largos tramos que recorrer en materia de inclusión, equidad y atención a la diversidad. Hemos avanzado muy poco en la tarea de ofrecer una educación de calidad, cultural y lingüísticamente pertinente, a los indígenas, así como en la de asegurar cobertura y atender con calidad y pertinencia a niños y jóvenes hijos de jornaleros agrícolas migrantes y a personas con discapacidad, entre otros retos.