Hemos visto que el acceso a la educación media superior ha mejorado en los últimos años, no obstante, el principal problema es la permanencia. Actualmente, los jóvenes tienen diversas dificultades para continuar con sus estudios, ya sean de carácter personal o institucional, señaló en entrevista Rogelio Sandoval, profesor de Electrónica del Centro de Estudios Tecnológicos Industrial y de Servicios (CETIS) 1, ubicado en la delegación Tláhuac. Por un lado, explica, obstáculos como la falta de apoyo económico, problemas sociales como las drogas, violencia o alcoholismo o el poco interés de sus padres han hecho que la matrícula se vaya desvaneciendo conforme pasan los semestres. Por otra parte, las instituciones no han sabido crear estrategias reales que retengan a los jóvenes, en cambio hay: profesores con poco interés, autoridades desvinculadas de la realidad de los estudiantes y programas que en pocas ocasiones los preparan verdaderamente para continuar con sus estudios superiores. Mientras tanto, Ofelia Silva, profesora de la materia de Literatura de la misma institución, señala que buena parte de la permanencia o no de los jóvenes depende del trabajo de los profesores, pues son ellos quienes pueden hacer la diferencia.
“Nosotros, los maestros, tenemos en nuestras manos una gran responsabilidad y compromiso con los jóvenes del país, no sólo en el nivel medio superior, sino en todos los demás. La diferencia entre un joven que deja la escuela o no radica, de manera directa o indirecta, en el trabajo de un buen o de un mal profesor”.
El trabajo de los maestros, sostiene, es entonces conocer a fondo a sus alumnos, profesionalizar su labor y conocer las necesidades educativas, psicológicas y sociales que tiene la comunidad escolar, a fin de crear lazos que mejoren las condiciones de los estudiantes. Una parte importante, finaliza, es el apoyo que las autoridades educativas brindan para que todo esto suceda.
“Los maestros no podemos mejorar las condiciones de los alumnos si nosotros no estamos en mejores lugares de trabajo, donde no existan serias fallas de infraestructura, carencia de materiales de trabajo o, incluso, inseguridad dentro y fuera de los planteles”.
Para Rocío Acosta, profesora de Literatura del CETIS 32, de la delegación Venustiano Carranza, actualmente los jóvenes cuentan con mayor oportunidad de ingresar al bachillerato, pero no de ingresar a la universidad. La mayoría, dice, busca preparatorias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) o el Instituto Politécnico Nacional (IPN), porque prácticamente tienen garantizado el acceso a la universidad. Sin embargo, estas instituciones no pueden albergar a todos los alumnos que lo soliciten. Ante ello, desafortunadamente las instituciones que ofrecen opciones técnicas y preparación para integrarse al mercado laboral como el CETIS o el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep) no acaban de convencer a los alumnos, quienes tampoco se sienten atraídos por dichas instituciones.